La lectura es una actividad fundamental para el desarrollo de la personalidad de los más pequeño en todos sus aspectos: en el rendimiento escolar, en la autoestima, en la forma de relacionarse con el mundo y en el proceso de aprendizaje. Entonces, la gran pregunta es cómo estimular en tu hijo el gusto por la lectura. La capacidad de lectura es fundamental para el nivel de rendimiento en todas las áreas del conocimiento.
Saber leer e interpretar un texto o un pequeño artículo de un libro, de una revista o incluso de un blog online como el de Materlu es importante no solo para la asignatura de inglés u otros idiomas, sino también para las matemáticas, el estudio de la ciencia, etc. Con la entrada al 3er año del primer ciclo, el niño adquiere un nuevo ritmo y necesita crear hábitos y reglas de trabajo y estudio. Saber cómo motivar a un niño para que adopte el hábito de la lectura es una cuestión que se plantean los padres muy a menudo.
Esto no quiere decir que dejará de jugar o de llevar a cabo actividades extraescolares, pero es una fase en la que el niño debe aprender a estar centrado en lo que está haciendo. Hay tiempo para todo. Para trabajar, estudiar y jugar.
¿Cómo podemos nosotros, los padres, maestros, hermanos y demás ayudar a estimular el gusto por la lectura?
1 – Aprender a apreciar diferentes tipos de arte
Los niños que entran en contacto cercano desde una edad temprana con diversos tipos de arte se vuelven más curiosos, les gusta aprender cosas nuevas, desarrollan el pensamiento crítico y obtienen la capacidad de socializar de forma natural.
Ir a museos, exposiciones, conciertos o parques temáticos y conectarse con las obras de arte y la música mientras se comprenda su significado, el mensaje y las emociones que pretenden transmitir, son formas de ayudar a un niño a interpretar medios más subjetivos de expresión y mejorar su capacidad de pensamiento crítico. Estas actividades brindan experiencias muy ricas y permiten que un niño desarrolle nuevos conocimientos de una manera lúdica, sin la «imposición» que se asocia con este tipo de actividades.
2 – Otorgar las herramientas para el desarrollo de la imaginación
A los niños les encanta jugar. Imitar a los padres, ir a ludotecas, jugar con marionetas, inventar aventuras con juguetes… Todo esto contribuye a despertar el placer a través del conocimiento y a enriquecer el tiempo libre del niño.
Asistir a espacios culturales es otra forma de estimular el gusto por aprender. El teatro, por ejemplo, es un arte en el que la palabra y la expresión corporal se unen para comunicar sentimientos, mensajes y experiencias.
3 – Enseñar a los niños la importancia de saber leer
Saber leer es mucho más que “saber leer”. Es la posibilidad de conocer nuevos mundos, de comprender otros puntos de vista, de imaginar, de aprender sobre uno mismo y, sobre todo, de llegar lejos en la vida.
Además, la lectura es fundamental para comprender y poder interpretar el mundo que nos rodea y tener acceso a una fuente inagotable de información.
4 – Elegir los libros más adecuados para la edad de tus hijos
Los primeros libros están compuestos, fundamentalmente, por imágenes. La historia está narrada a través de ilustraciones y algunos subtítulos, y esto le da una gran libertad al niño para que luego pueda imaginar e inventar nuevas historias.
Cuando el niño es mayor empieza a apreciar otro tipo de lectura: los cuentos de hadas, las fábulas y los pequeños cuentos aún acompañados de imágenes. A medida que se asienta el gusto por la lectura, el niño elige sus propios libros. Este gusto se puede fomentar con visitas periódicas a librerías y bibliotecas y con la lectura compartida.
5 – Incluir libros en su rutina diaria
Los padres deben empezar a leerles a sus hijos mucho antes de que aprendan a leer y fomentar la interpretación de ilustraciones y la manipulación de libros adecuados a la fase de desarrollo del niño desde una edad temprana.
Leer un cuento antes de acostarse, como parte de la rutina de sueño, es una excelente estrategia para ayudar a desarrollar el gusto por la lectura, pero también para fortalecer los lazos afectivos entre padres e hijos.
6 – Dar ejemplo
Al igual que con muchos otros temas de la paternidad, dar ejemplo es una excelente manera para que los padres animen a sus hijos a adoptar un determinado tipo de comportamiento. Si tienes el hábito de leer y si leer con y para tu hijo es una actividad que realizas regularmente, seguramente será más fácil que tu hijo desarrolle el gusto por la lectura.
Con libros como Vuela alto y El gran chef, podemos ayudar a que tu hijo se apasione por la lectura. La lectura estimula la creatividad, el aprendizaje, el interés por nuevas áreas de conocimiento, enriquece el vocabulario y desarrolla la escritura. También promueve la creatividad y la capacidad de escribir textos más largos y explicar ideas más complejas.